Devuelto al ruedo luego de algunos años de convivencia monogámica, y con la curiosidad intacta (que es lo único que conservo intacto a esta altura de mi vida); he estado realizando durante los últimos meses un estricto, pero no por ello menos emotivo estudio de campo sobre los placeres y peligros que enfrenta un ejemplar masculino “single” a la hora de intentar concretar algo con una mujer.
Luego de este primer párrafo, y viendo que se frotan las manos esperando detalles morbosos de mi intimidad que les permita burlarse impúnemente en mi cara enarbolando el trillado “no nos reímos de vos; nos reímos con vos”; me apresuro a aclararles que los mismos formarán parte de un ordenado informe, que llegado el momento evaluaré publicar en este espacio o en los mantelitos descartables de Burguer King.
El caso es que antes de que eso suceda, y a modo de adelanto, creo que es conveniente compartir con ustedes mi hallazgo mas importante.
Recuerdo con ternura mi adolescencia; en donde todos los problemas se resumían a evitar el embarazo o alguna improbable venérea, siendo lo mas difícil de todo encontrar a quien quisiera correr estos riesgos con nosotros.
Poco tiempo después vino el SIDA a complicarnos la existencia; pero a pesar de que ya nada fue lo mismo, con un poco de conciencia y bastante de suerte, aquí estamos en carrera todavía.
Lamentablemente no había terminado ahí la cosa, y hoy debemos enfrentarnos a un nuevo flagelo.
El SCSM (Síndrome de la Concha de la Señora de Midas) nos demuestra una vez mas, que a la hora de coger (justo cuando creíamos que teníamos todo bajo control), siempre puede presentarse una nueva complicación.
Como generalmente ocurre en estos casos, es fundamental la información; y es por este motivo que me parecía adecuado hacerlo por este medio lo antes posible.
Ojalá alguien me hubiera advertido a tiempo…
Ultimamente estoy recibiendo tentadoras ofertas, pero no precisamente de mujeres hermosas, sino de tasadores de la calle Libertad…
Nota: Como es lógico, toda moneda tiene dos caras. La ceca del SCSM es el SCHM (Síndrome de la Chota de Midas) el cual no llegué a investigar porque mi rigor científico tiene un límite y mi esfínter su corazoncito.
13 comentarios:
que? eso dorado en su bragueta no era purpurina? aaahhh yo ya me lo hacía tras bambalinas en el teatro de revistas.....
degeneradito
...que es lo único que conservo intacto a esta altura de mi vida
Usted es mi alter ego masculino.
Creo, esto sin estudios que lo comprueben, que la que padecen este fatal síndrome son fácilmente reconocibles por su tremenda cara de malcog... ejem!...
Su rigor no es tan científico, disculpemé que le diga, si no corroboró CADA UNO de los casos... ASI no, eh...
Pero creo que el pueblo lo va a pedir, queremos oir las experiencias de sus "trabajos de campo", unas pequeñas anécdotas que nos alegren las mañanas caramba...
besos!!
Jajajajaajajajajajajaa
Con razón!!!!!
Me hubiera avisado antes y hubiera entendido a algunas féminas con sus caras de ortelano!!!!
Ahora, la platea femenina pide a gritos un estudio projundo y pormenorizado de la contraparte dorada..no, no, no!!!! que lo pario! siempre epnsando en lo mismo usté? No estoy hablando del agujero de oro, sino del instrumento masculino!
No se puede eh! Simpre igual...
Dormilona dorada: Come together, que hay algo que tengo que contarte.
Something ocurrió aquel día, que golpeó mi destino como Maxwell’s silver hammer.
Oh! darling, no me regañes solo por mi bragueta un tanto dorada.
Estaba hasta las manos por entonces, en el Octopus’s garden.
I want you porque here comes the Sun... y todo porque you never give me your money para saldar mis deudas con Sun King; mean Mr. Mustard por el asunto ese del polytene pam.
Por eso la envió a cobrarme; she came in through the bathroom window, mi querida Golden Slumbers, y ahí nomás me dice “carry that weight”, al tiempo que se abalanzaba sobre mi, que me encontraba sentado en el inodoro leyendo poesía de Julieta Prandi
Con los pantalones por debajo de las rodillas poco podía hacer, asi que en ese momento pensé que era the end; pero no.
Solo me dijo: dale un beso a her majesty y acá no ha pasado nada.
Así fue como comenzó todo aquel día... no quiero recordar los detalles, ella me obligó.
Así fue entonces como contraje esta extraña dolencia en Abbey Road…
Calíope: No se si es por la cara, la forma de caminar o de parar un taxi... lo cierto es que uno medio que las reconoce de antemano.
Si me pongo a contar mis pequeñas anécdotas, le aseguro que no solo le alegro la mañana, sino que se me caga de risa hasta que anochece (y eso teniendo en cuenta el cambio de horario)
Besos!
Lady: Y que quiere, amiga; usted me habla de "estudio profundo" y me confunde.
De todas formas olvídese del tema ya que no pienso claudicar en mi posición respecto a esa segunda etapa de la investigación (que es la posición del culo contra la pared)
jaja!!No le puedo decir más nada que reíme, disculpe mi mediocridad, pero...si aclARO OSCURESCO!
sALUDOS!
Puta madre! No se da cuenta que hubiera sido toda una aventura!!!! Y lo que nos hubieramos divenrtico con la anecdota!!!
Usté no se debe a su publico?? EH??? Y los que queremos saber???
¡Pobres criaturitas de Dios!!
Llévelas ¡urgente! al doctor...
¿no sabe, que no todo lo que relumbra ES oro??? :)
Había escuchado la frase "parece que la tiene de oro" con respecto a un tipo, pero no me imaginé que fuera nada malo, y mucho menos contagioso.
Elipse: Nada de mediocridad, amiga. Si me dice que se divirtió al leer esto para mi valió la pena el tiempo que me llevó hacerlo.
Ojalá comentaran todos los que se ríen y no lo hacen porque se sienten en la obligación de ser graciosos ;)
Lady: Si, muy valiente lo suyo, definitivamente. Yo también salgo a buscar aventuras con el culo de otro... así cualquiera :P
Y claro que me debo a mi público, sinó seguiría garabateando revistas en la soledad de mi baño.
Que quiere saber?
Pregunte nomás, dele...
Chinita: Felicitaciones por su futuro!
Claro que no todo lo que relumbra es oro...
Y hablando de eso; nunca reventó de un zapatillazo una luciérnaga?
Un flash... :P
Godsze: Es cierto que es frecuente escuchar esa afirmación con respecto a los hombres.
Ajustándonos a la definición; esto se aplicaría a los hombres que tienen vía libre para mandarse sus buenas trastadas con sus parejas, porque total, pareciera que las minas en cuestón son capaces de perdonarles hasta que las hayan engañado con la hermana mientras la madre sacaba fotos.
Con respecto a la mujer es levemente diferente, ya que se aplica a aquellas féminas incogibles que histeriquean hasta la explosión testicular del varón elegido; que vende su dignidad día a día a cambio de la creencia de "hoy si la pongo".
Mas allá de esta breve reseña; con mi investigación descubrí que la cosa era literal e infectocontagiosa.
Ante semejante hallazgo me sentí un auténtico gil a cuerda... ya que está por acá, le molestaría darle un par de vueltitas a la mariposa?
Jajajajaja!!!!!!
¡Gracias Don Gense!!
Le tengo que confesar que me confundió :) en un principio pensé que en sus horas libres se dedicaba al tarotismo, una suerte de oráculo... un pitoniso...
Pero no. Estaba hablando de mi futuro sobrino virtual :)
Le dejo el link de la madre, una chica que sí vale su peso en oro :D
Ah, la libertad de la soltería!
A veces (sobre todo los miércoles 14) sueño que soy viudo o cornudo, y salgo de parranda para olvidar.
Pero con los infinitos virus de hoy en día, la verdad, me quedo en el molde.
Cuídese mijito y suerte ¿probó metiéndola en un vaso de coca-cola?
Me robaste unas cuantas sonrisas leyéndote y mirando las fotografías... agradezco entonces tu presencia en mi blog, por partida doble!
Chinita: Entre el título de "oráculo" y "pitonisio", si me lo van a gritar por las calles del barrio, sinceramente prefiero el segundo.
No vaya a ser que alguno de los pibes no sepa bien el significado, lo reinterprete y se me venga al humo ;)
Amalio: Me anoto la sugerencia para el 14. Lástima que está tan lejos, que sinó nos íbamos de juerga por ahí!
Lo de la Coca Cola me lo plantea como una posible solución o sería lisa y llanamente una "eutanasia genital"?
Insurrecto: Gracias por darse una vuelta y me alegro que le hayan divertido mis barrabasadas.
Para eso estamos.
Saludos!
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